Uno de los aspectos más conocidos de La Reserva de la Biosfera de la Siberia es la presencia en su territorio de grandes embalses como La Serena, Cíjara o García de Sola, un atractivo de referencia para la Reserva desde el punto de vista turístico, deportivo o paisajístico. Estos grandes elementos justificarían de por si la importancia de los humedales para la Reserva de la Biosfera de La Siberia.
Menos conocidos y más frágiles son otro tipo de humedales en los que la Reserva ha realizado proyectos de investigación: las turberas y los humedales temporales.
Desde su declaración en 2019, la Reserva de la Biosfera de La Siberia ha desarrollado proyectos de investigación y conservación centrados en estos exclusivos ecosistemas, en concreto:
- Proyecto de investigación para la mejora de la conservación de hábitats en terrenos de titularidad pública y áreas protegidas de La Reserva de la Biosfera de La Siberia: Lagunas temporales mediterráneas con presencia de Hábitat 3170 (2021)
- Proyecto de investigación para la mejora de la conservación de hábitats y especies singulares en los montes de utilidad pública del Cíjara / Reserva de la Biosfera de la Siberia. Hábitats de Turberas (2019)
El resultado de estas investigaciones ha sacado a la luz la importante presencia en el territorio, hasta entonces desconocido, de estos curiosos hábitats (hábitats prioritarios para la Directiva 92/43/CEE).
Las Turberas
Más propias de latitudes norteñas o de alta montaña, estos frágiles y diversos hábitats ocupan pequeñas superficies de terrenos permanentes encharcados, ácidos y con escasez de nutrientes.
Estas peculiares características influyen en las características de la flora y la fauna que en habitan, siendo frecuente en ellos la presencia de musgos de tipo esfagno (Sphagnum sp.) o la presencia de plantas carnívoras como Drosera rotundifolia.
En la Reserva de la Biosfera de La Siberia, debido principalmente a la escasez de precipitaciones (agravadas por el actual Cambio Climático) y a la actividad humana (principalmente por aprovechamientos ganaderos) estos hábitats con sus especiales características hídricas son poco frecuentes y en muchas ocasiones se encuentran gravemente amenazados.
En total, en el territorio se inventariaron un total de 15 turberas, principalmente situadas en los montes públicos de las localidades de Fuenlabrada de los Montes, Helechosa de los Montes y Herrera del Duque.
La protección y recuperación de estas joyas de nuestro territorio es uno de los objetivos clave en los planes de conservación de la Reserva de la Biosfera de La Siberia.
Las lagunas temporales
Este hábitat tan característico de nuestro clima mediterráneo, presentes principalmente en dehesas y llanuras, son pequeñas lagunas de poca extensión que normalmente se secan total o parcialmente durante el verano. Presentan poca profundidad y las aguas tienen un contenido de nutrientes bajo o moderado.
En ellas habitan elementos vegetales peculiares como Baldellia ranunculoides, Eryngium corniculatum o diversas especies de juncos (Juncus sp.), además de ser refugio de insectos (libélulas, escarabajos, etc.) o anfibios (tritones, ranas, sapos).
Al igual que el caso de las turberas, en nuestra Reserva, la escasez de precipitaciones y la actividad humana, suponen una grave amenaza para estos efímeros y delicados hábitats.
En el proyecto de inventariado de lagunas temporales llevado a cabo con el apoyo de la Reserva de la Biosfera de La Siberia se identificaron hasta 53 humedales temporales, caracterizando su estado actual y proponiendo acciones de conservación, para proteger o restaurar estos espacios tan característicos de nuestro paisaje.